Esta noche, mi hija de 3 años, me acariciaba el pelo mientras lloraba en silencio apoyada en su cuerpecito tan chiquitín.
Una vez mas sufro los insultos de su padre, al que no se si quiero de verdad. Pero después de 13 años, sigo a su lado.
No creo que esta sea una historia diferente, solo se que es real, y que, jamas pensé que me pasaría a mi.
Cuando cumplí los 21 años, me fui de casa. Tenia un novio desde hacia unos años y bueno.....no salio nada bien, me engaño y eso, supongo que a todos nos pasa alguna vez, y que suerte los que no lo han sentido. El caso es que después de un tiempo le conocí a él y fue muy especial, al menos para mi.
Le conocí en una fiesta a la que no fue ni Dios, había Jam sesión, poca gente y un ambiente especial. Habia oído historias suyas y cuando me lo presentaron ya me había enamorado de él. Me hizo sentir la mujer mas especial del mundo, y al final de la fiesta nos fuimos a casa de un amigo y todos nos quedamos a dormir alli. Cuando nuestro amigo repartió los cuartos para dormir, se olvido de mi y yo pregunte: " y yo, donde duermo?" entonces el contesto: "tu conmigo" y así fue, dormimos juntos. Los días siguientes, no podíamos despegarnos el uno del otro, todo era como en un cuento, le llevaba, le traía, dormíamos juntos todos los días en mi casa hasta que os mudamos a la suya, todo iba demasiado rápido. Y un buen día, sucedió. Una tarde le dejaba cerca de su casa y a la hora de despedirnos no me dio un beso. Mi cara cambio, y como anteriormente había tenido una relacional basada en los cuernos que me ponían, deje de sentirme feliz. Todo seguía igual solo que con menos besos, porque en lo que al sexo se refiere, aquello funcionaba muy, pero que muy bien. Cuando llego el momento de presentarme a su gente empezó a presentarme como una amiga, lo cual no me importaba, hasta que pasaron los años y seguía siendo su amiga, pero seguíamos compartiéndolo todo, follando y viviendo juntos.
